Echando un vistazo al mapa vimos que cerca de casa hay un lago, en esta época del año helado. Así que... ni cortos ni perezosos... preparamos la mochila con un poco de agua, frutos secos y las manoplas de repuesto y emprendimos nuestro viaje, en busca de uno de los 1000 lagos que caracterizan al país.
Caminamos y caminamos, atravesamos bosques, parques de niños, un heesburguer, casitas de madera, parques de entrenamiento de perros, pistas de patinaje, más casitas de madera, subimos y bajamos cuestas de nieve y hielo..... y al final... después de mucho caminar... llegamos a una explanada enorme, lisita lisita, con unas leves pisadas de los esquiadores de fondo. Suponemos que llegamos al lago helado, pero... al estar cubierto de nieve... no lo podemos asegurar. La vegetación del entorno parecía indicar que estábamos en el lugar correcto, pero me temo.. que hasta bien entrado el verano.... no vamos a conocer la verdad.
3 comentarios:
¿se os olvidó el taladro para el hielo y el anzuelo y el sedal para pescar unos pececillos?... Un error, imperdonable... (y más si fue Miguel Ángel)
Jajaja. Aun tenemos que practicar...tanto la pesca como la natacion...
Y las fotos antes-ahora, muy típicas vuestras también, eso si, no?
Bss
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