sábado, 31 de enero de 2015

Si dicen las estadísticas que el pasado mes de Noviembre sólo tuvimos 11 horas de Sol, supongo que dirán algo parecido del mes de Enero que termina dentro de un rato. 
Enero no es ni mucho menos tan oscuro como Noviembre y Diciembre, se nota que hay más horas de luz, pero eso no quiere decir que haya más horas de Sol, porque de eso.... en lo que va de año... hemos tenido especialmente poco. Ha sido un Enero nublado, gris, con la nieve suficiente para hacer un par de muñecos y alguna que otra fortaleza para defendernos de los bolazos del enemigo, pero nada que ver con el Invierno que nos recibió hace dos años; y hielo... de eso si que hemos tenido bastante, hielo y deshielo un día sí y otro también. Las cuestas estás más que apetitosas para trineos, resbalaculos, y gentes arriesgadas con ganas de patinar: si están heladas porque te deslizas suavemente y la ropa a penas se moja, y si están en proceso de deshielo... se baja mucho más rápido pero si no tienes cuidado... la ropa termina empapaica, y según que días serían necesarios los plastificaniños.
Como voy corre que te corre a todas partes y ando por la vida pensando en mis cosas... no me había dado tiempo a echar de menos al Sol. Yo veía luz en la calle (cuya intensidad aumenta al reflejarse en la nieve) y si a eso le sumamos el subidón de Sol de las vacaciones de Navidad... estaba tan contenta. Pero ayer, gracias a unos de mis cachorros fui consciente de que fue el primer día desde hace muchos meses en el que al volver a casa a eso de las 16.30 no tuvimos que encender la luz de la cocina para hacer los deberes: al abrir la puerta de casa, dijo mi medianillo sorprendido y algo triste ¡pero mamá!, ¡si esta mañana nos hemos dejado la luz encendida! (cosa que ha pasado en alguna que otra ocasión), y cuando fue a apagarla....¡Oh maravilla! se le iluminó la cara (y es que cuando mi medianillo sonríe...le brillan los ojos y tiene una sonrisa que no le entra en la cara), encendió, apagó, encendió, apagó....otra sonrisa ¡mamá mamá! que lo hemos hecho bien, 
¡es que tenemos el Sol dentro de casa!

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