Mes de Julio en Finlandia

Aunque por las fotos no lo parezca, en esta parte del mundo también estamos en Verano; no tenemos "ola de calor", ni siquiera nos acercamos un poco, pero una vez que superas el bajón de asumir que de momento ni playa ni lago, se lleva bastante bien.
Este año parece que tenemos temperaturas distintas a lo que estamos acostumbrad@s. Ayer amanecimos a 12 grados, poco a poco conseguimos llegar a los 18 y creo que hasta en algún momento estuvimos cerca de los 20.
Tuvimos un buen chaparrón por la mañana y lluvias intermitentes durante todo el día (así llevamos más de una semana), a media tarde salió el Sol y pudimos salir un rato con las bicis, así en lugar de pisar charcos los pollos los pasaban por encima, con las consecuentes salpicaduras de barro que bien podrían haber servido de ejemplo para un anuncio de detergente. Menos mal que tenemos lavadora.
A pesar de que las temperaturas son más primaverales que otra cosa, nos resistimos a dejar aparcada la ropa de verano, AHORA O NUNCA, si no nos la ponemos ahora no habrá oportunidad hasta dentro de 10 meses. Así que aunque aquí l@s niñ@s van plastificad@s al parque y hasta con gorros de algodón, nosotr@s nos resistimos. Los pollos siguen saliendo a la calle con su pantalón corto o bañador (si llueve mejor bañador, que parece que seca mejor), y yo intento sacar del armario los vestidicos de tirantes, aunque tenga que ponerme encima una "bufanda de verano" y una chaquetica de entretiempo. A pesar de todo intentamos seguir saliendo con sandalias; los pollos han descubierto que si no llevan pantalón largo, con esta lluvia y sus patas flaquitas, las botas de agua no sirven de mucho, porque el agua se cuela por arriba y hace "efecto piscina", sobre todo si saltan charcos.


 NOTA DE LA AUTORA: es sólo mi segundo mes de Julio en este país, así que es poca la experiencia que tengo en lo que a la meteorología de estas tierras y en esta época del año se refiere. Pero... si no me falla la memoria... fue también a mediados del mes de Julio de 2014 cuando hicimos nuestra primera expedición a Hanko. A pesar del cielo gris de la mañana, no nos detuvimos, y así nos pasó, que tuvimos un día de playa pasado por agua.

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