Restaurante típico finlandés. Savotta

Justo en frente de TuomioKirko, la catedral luterana, hay un restaurante típico finlandés llamado Savotta. Todo el local ha sido renovado recientemente, así que, aunque mantiene fotos antiguas, en blanco y negro, de escenas tradicionales del país y tapices y bordados en las paredes, el ambiente general es más bien modernillo.
Eso si, los camareros y camareras van vestidos de campesinos karelios y los platos en los que te sirven parecen salidos de un mercadillo, cada uno de su padre y de su madre (expresión muy "gasquil", que significa todos diferentes).
Como era una cena de cortesía nos decidimos por el menú degustación, que era el que nos recomendó nuestro camarero de camisa de cuadros y pantalón corto con peto.










Para empezar nos sirvieron un montón de bocados típicos sobre un tablón de madera: salmón ahumado, arenque en salsa, salami y magro de reno, unas laminillas de solomillo de alce, queso ahumado, ensalada de col, patatas cocidas, y lonchitas ahumadas de un pez del que he olvidado el nombre. Todo muy rico.


De plato principal, cómo no, carne de reno con puré de patata, frutas del bosque y salsa de arándanos. La carne estaba tierna, tierna y, aunque no soy fan del puré de patata, la mezcla de todos esos sabores era francamente buena.



Para terminar, helado "Sisu" (palabra en finés que significa una mezcla de perseverancia, estoicidad y tozudez), con un toque de salmiakki, compota de frutas del bosque, migas de galleta y sirope de sauce.
Todo el menú va acompañado de una degustación de vino en cada plato, incluso uno de frutas hecho en algún pueblo cercano a Hameenlinna. Como no somos aficionados al vino, no puedo valorar las bondades de esa parte de la carta.
Como colofón, un chupito de koskenkorva, un vodka finlandés que te deja la garganta desinfectada hasta el próximo invierno.
 De la misma cadena de restaurantes son SASLIK en neitsytpolku, 12, que ofrece comida típica rusa;SAVU, en tervasaari y SAAGA, en bulevardi, 34, con comida típica lapona.