viernes, 28 de junio de 2013

viajar en avión con tres menores

Alucinante, realmente alucinante. ¿cómo quieren que lo hagamos??. ¡Nunca había oído hablar de nada parecido! supongo que a más de uno os habrá pasado... me quedé flipada.
Cual sería mi sorpresa hace unos meses....(cuando, con toda mi alegría y emoción me dispuse a planificar las vacaciones de verano), y me encontré con que no me dejaban sacar los billetes por internet.
Resulta que en muchas compañías aéreas, por política de empresa (y corríjanme si me equivoco), no está permitido que un solo adulto viaje con tres menores de 12 años. Si lo intentas sacar por internet, imposible; En agencia de viajes supongo que sí, pero no tenía ganas ni fuerzas para: buscar agencia de viajes con oficina, llegar en tren con los tres pollos hasta allí y llevar un entretenimiento para los tres mientras tramitaba los billetes, en un idioma que no es el mío; a saber dónde y cómo habíamos terminado, jeje.
En Iberia no me dejaban, en last minute y otras páginas similares tampoco, en Finnair (que es el mismo vuelo de iberia) sí, pero visto lo visto... no me atreví, me daba miedo llegar al mostrador de facturación con los pollos, la tensión, nervios y emoción previos al vuelo, las maletas, las mochilas de mano con juguetes y bocatas para el trayecto (porque como nunca sé si nos van a dar un refrigerio o no... prefiero ir preparada, siempre llena de bolsas y accesorios varios, como si el vuelo durase días).
La solución que me dio una amiga que trabaja en el sector, al menos de momento, fue contratar (por 50 euros) el servicio de acompañamiento para uno de los menores. Lo que supone que dos de los cachorros viajarían conmigo y al otro le ponen una persona que le acompaña desde el momento de la facturación hasta el avión y una vez aterrizado, le acompañan del avión hasta alguien que le espere al otro lado de la puerta. Indudablemente, eso me salía más barato que pagar el viaje del padre de las criaturas, como acompañante real, pero por internet tampoco era posible esa opción, así que al final, optamos por sacar billete también para el padre de las criaturas (2 adultos y tres menores). ¿Qué pasó?, que en lugar de venir los cuatro en vuelo directo, sacamos 5, vía Berlín, con escala, salía más barato. Toda una aventura, tuvimos que salir de casa a las 3.30 am, menos mal que ya era de día, eso lo hizo muucho más llevadero. También ayudó bastante el que la tarde anterior les hiciese un poco de lío con las siestas y comidas y les acostase un poco antes de lo normal.
El vuelo, a pesar de la escala fue tranquilo y apacible, y conseguimos dormirnos los cinco. WOW.
Menos mal que el trayecto era Vantaa/Madrid, no me quiero ni imaginar cómo habría terminado la historia si viniésemos desde Singapur.


1 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi también me pasó algo parecido. La distancia era más corta, al final optamos por el coche.

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