Pero si el madrugón cuesta un sábado normal, cuesta mucho más cuando tienes que prepararte para ir al cole. En el centro de los cachorros han decidido hacer un "superdivertido sábado lectivo".
La "idea inicial"es convocar a padres/madres y alumn@s para reforzar lazos, acercamientos entre familias y conocer de primera mano el día a día en el cole.
La "idea encubierta" es que de esta manera se pueden alargar un día más las vacaciones de octubre que pasarán de los dos días que aparecen en el horario escolar a tres. Lo que a efectos de planificación familiar supone que un@ de l@s dos progenitores se tenga que pedir al menos un día libre en el trabajo (porque los campamentos urbanos están planificados sólo para dos días).
Si el año pasado nos pusieron a mover el esqueleto, este año nos han tenido haciendo manualidades, hemos aprendido a reparar una bici (reparar un pinchazo, colocar el sillín, meter la cadena), a hacer una cadeneta de lana y un portavelas para Halloween, entre otras....
Hemos sido testigos, una vez más de lo que comen y cómo lo hacen (lo de servirse sol@s la comida, buscar donde sentarse y decidir compañer@s de mesa, recoger todo después de comer y dejarlo como lo encontraste, etc).
Me ha sorprendido, que en el patio cuando jugaban al fútbol estaban mezclados los niños de todas las edades en el mismo equipo había de 7 años hasta 11, yo creo que en mi época escolar éramos más clasistas para esas cosas, tal vez me falle la memoria, juventud, divino tesoro.
Mientras en la clase del medianillo hemos jugado y hecho alguna que otra actividad escolar (una especie de oca en la que avanzabas o retrocedías jugando con las matemáticas), en el curso del mayor han estado programando con el ordenador y dirigiendo un lego en función de los comandos dados, les han llevado al aula de carpintería y al de costura, donde al parecer están haciendo unas fundas para la tablet. 
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