Ubicado en el término municipal de Espoo a media hora en coche de Helsinki puedes encontrar un parque natural por el que emprender largas caminatas, aptas para grandes y no tan grandes. Las distintas rutas están señalizadas con rombos de colores.
Puedes encontrar distintos paisajes, en función de la ruta que escojas, siempre con sube y bajas. Dicen que hay más de 100 lagos y mucha, mucha roca.
En invierno la gente hace esquí de fondo, pero nosotros aún no estamos preparados para ese deporte, este año seguiremos con el patinaje, a ver que tal.
La flora y la fauna también son variadas. Aquí se encuentra un espectacular observatorio de pájaros; dicen que hay muchas ardillas voladoras, de ahí el nombre del parque, pero deben ser más tímidas que las de otras regiones, o nosotros muy ruidosos.
En agosto y septiembre (las dos fechas en la que lo he visitado) es fácil encontrar distintos tipos de setas y frutos silvestres.
Hay zonas habilitadas para la acampada, alguna que otra caseta WC, zonas destinadas a la ingesta de salchicas o lo que sea menester, y hasta un museo pequeñito a la entrada.Merece la pena hacer más de una vista.
Si vas en autobús, debes llegar a la estación de tren de Espoo y ahí subir al autobús 85A.Tal Vez te interese:
1 comentarios:
Que pasada.
¿y dejan hacer barbacoas en medio del bosque?
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