Sobre el merchandaising

Durante estos últimos tres años ha habido algo que he venido echando de menos en estas tierras del Norte, no es que me moleste, de hecho muchas veces hasta se agradece, pues te quitas un montón de morralla de en medio, pero es un hecho que me resulta curioso, sobre todo al contrastarlo con el boom publicitario al que somos sometidos en España.
Se invierte prácticamente cero en merchandaising para promocionar productos. Y al decir productos me refiero a productos del día a día.
Me dí cuenta el otro día, cuando estaba con los cachorros delante de la estantería de los cereales, como siempre se crea un debate nacional en torno a cual deben elegir, cada vez que toca comprar cereales tengo tiempo más que suficiente para ir a la luna y volver varias veces sin que se den cuenta de mi ausencia. Pues el otro día, mientras elegían entre las diferentes marcas me dí cuenta de que aquí ni con el cacao en polvo, ni con los yogures, ni con los pack de bebidas, regalan absolutamente nada. De todas las cajas que había en la estantería sólo había una en la que te regalaban una cuchara (es a lo que mi hermana pequeña llamaba "regalo seguro") si comprabas tres cajas, te inscribías en la web y mandabas el dinero correspondiente.
En España, sobre todo cuando llega el verano, las marchas se abalanzan sobre l@s consumidores y te regalan un balón de playa con la crema solar, el bol de cereales por cada 200 yogures, la gorra con los refrescos, la sombrilla o la esterilla con el protector solar, la superbatidora para el caco en polvo o la cuchara que funciona con pilas para enroscar los espagueti. De hecho si tienes un cachorro simpático que sonríe en la línea de caja o una madre que es amiga de l@s dependient@s, te lo regalan igual; y en el banco... ya ni recuerdo lo que te pueden llegar a regalar en el banco por abrir la cuenta bancaria, desde baterías de cocina/ordenadores, hasta toallas/bolsas de deporte para los clientes accionistas.
El caso es que aquí, de todo eso... ni mu. ¿tan seguros están de lo que venden?. Supongo que no ven la necesidad. Y en cierto modo se agradece, dejen de regalarme cosas y a cambio, inviertan en la calidad de lo que venden, dejen de cobrar comisiones por sacar dinero del cajero.