lunes, 25 de septiembre de 2017

Se acabó lo que se daba

Hemos tenido un fin de semana estupendo, soleado y temperatura por encima de los 15; woichiwow, porque dicen que vamos a estar así toda la semana. 
Ha sido un fin de semana con temperaturas mejores que las que tuvimos en Junio y algunos días de Julio, con un Sol de los que calienta, no de esos que aparece para hacer acto de presencia y que aunque está aquí, se encuentra como pensando en otras cosas.
Cuando tenemos días como estos me entra el acelere, y a las 10 de la mañana puedo tener a toda la familia preparada en la calle, (refunfuñando algunos, sí, pero preparados): mochilas listas y cargadas de bocatas, fruta y agua, bicis a punto y ¡marchando!.
En días como estos, es  como si se apoderase de mí el espíritu de mi madre en los años 80 y digo mi madre de entonces (ahora la comprendo), no la abuela adorable y sonriente que es ahora, jejeje, sino aquella que decía frases que ahora salen de mi boca como "venga, a jugar al aire y al Sol"y podría seguir ampliando el repertorio, pero no viene al caso y aunque esté a casi 4000 km de distancia, prefiero no jugármela, jejeje.
En días como estos tengo una sensación que no puedo describir, no sé si por ser consciente de estar transformándome en mi madre o por causa del buen tiempo y todo lo que el hecho acarrea. Me entran las prisas y vivo este día como si fuese el último, arrastrando con ello a toda mi familia e incluso a algunos de los amigos de mis hijos si por suerte o por desgracia se encuentran cerca. En breve buscaremos el sol cual salamanquesas y pasaremos de una acera a otra para poder atrapar algún rayo, aunque sepa que es un sol tramposillo, de los que ni calientan ni na de na, pero sirve para engañar al cerebro.

Supongo que algún día mis pollos entenderán el porqué de mi comportamiento, y si no, ¡qué le vamos a hacer!, simplemente pensarán que su madre estaba un poquillo mal de la cabeza, y me recordarán como una loca de las actividades al aire libre. Puede que con este comportamiento esté condicionándoles a que disfruten como nadie los días lluviosos, esos de mantita y libro ¿mantita y libro? sólo si está oscuro, que como haga sol todos a plastificarse y a saltar charcos. 

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