lunes, 2 de mayo de 2016

Operación Paula

Mientras media España se movilizaba para el puente y se producía en la Península la que, junto con Semana Santa, es la mayor migración del año: l@s del Norte van al Este, l@s de la Meseta a la costa y los del Sur se apelotonan en la Feria de Jerez, nosotros hemos pasado el fin de semana entregados a las tareas del hogar y a disfrutar del Sol y el buen tiempo que llevábamos meses esperando.
No hemos tenido ni puente, ni fiesta ni na; y como Vappu (1º de Mayo) ha caído en Domingo nos hemos quedado sin una de las festividades (junto con Navidad), que no pasan al viernes más cercano para evitar puentes y acueductos.
El caso es que nos hemos quedado en casa, y como en breve tenemos visita, hemos aprovechado para poner en marcha la "operación Paula".
Como llevamos tiempo sin tener visitantes (hace unos días estuvieron unos amigos con sus cachorros, pero como fue debido a un caso de fuerza mayor y, además, viven en Finlandia, no dio tiempo ni a operación limpieza ni a llenar la nevera -que estaba literalmente vacía- ni a nada. A los pobres casi les toca hasta hacerse la cama.
En esta ocasión, la mayoría de mis esfuerzos se han centrado en los picaportes de las puertas. Flipo, creo que jamás en mi vida hasta este fin de semana había dedicado mi tiempo a los picaportes, y así estaban, con una pringosidad tal que parecía que habían participado en varias tomas falsas de la película de los cazafantasmas. Y ya que estamos, diré que la misma pringosidad también se notaba en algunos de los interruptores.
Menos mal que en casa estamos tod@s muy concienciados con esto de la igualdad y también los pollos han estado entregados a la operación Paula: han recogido juguetes, barrido varias estancias de la casa y quitado de la circulación las botas, gorros y guantes de Invierno. Mientras tanto, el padre de las criaturas también se ha dedicado con empeño a la tarea de limpieza de ventanas (recuerdo que son dobles, así que la tarea dura algo más de lo habitual), donde también había pringosidades entre las que se encontraban restos de blue-tack que señalaban que hace no mucho tiempo estaban llenas de manualidades realizadas en el cole sobre el invierno. Ha sido necesario el uso de cuchilla-raspador para que algunas zonas tuviesen la textura que corresponde a un cristal. Ahora están tan relucientes que parece que solo hay marcos, creo que fue por eso que empezamos a pegar las manualidades.

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