sábado, 15 de diciembre de 2012

buscando ropa para los niños

Llevamos aquí tres días y hemos estado a temperaturas entre los 0º y los -4º, para los "lugareños" esto no es considerado como mal tiempo, "buen tiempo", o al menos eso piensa la amable recepcionista del hotel, la misma que me ha "robado" 2 euros por tener acceso a internet en el ordenador del hotel durante 30 minutos.
Sí, aún sigo sin tablet, sin móvil y sin cargar con el portatil a mis espaldas; aunque, en contra de mi voluntad, eso cambiará en los próximos meses.

El caso, es que viendo que a esto no lo consideran frío, FRÍO, como lo consideramos en mi casa..., he considerado que debo incrementar la ropa de abrigo del fondo de armario de mis cachorros, si es que quiero que participen en las actividades de "exterior" o al menos me puedan acompañar a comprar el pan. Con los zapatos y botas que tenemos en Madrid no me duran ni un telediario.

Aprovechando que el padre de las criaturas ha ido a la empresa responsable de nuestra actual situación, he visitado no una, ni dos sino tropecientas tiendas en las que he visto más abrigos de nieve, monos completos, sólo petos y dos piezas de los que puedo memorizar.

Yo, no soy aficionada al esquí, ni a los deportes de invierno, así que no tengo ni la más remota idea de lo que tengo que compar, ¿los más gorditos?, ¿los más finos y ligeros?, ¡yo qué sé!, a ver si, dentro de mi incultura del traje de invierno, les compro los más finitos pensando que son "la leche" y resulta que no nos valen ni para el mes de junio, o por contra, les compro los más gordos y apetitosos y resulta que luego son las albóndigas con patas del cole y no se pueden ni mover. En fin, que me he tenido que hacer otra lista de marcas de ropa, para investigar tranquilamente en Madrid, no vaya a ser que me de por preguntar a un/a dependiente y entre su balleeeno y el mío termino comprado unas sábanas de los angry birds, que aquí están por todas partes.

¿y los zapatos?, yo que sé los que calan y los que no, los que aguantan temperaturas infernales/invernales y los que no, los que transpiran y los que cuecen -aunque no enriquecen-. Sí, ya sé, al igual que con la rpa, podría orientarme por las etiquetas de distintos colores y tamaños, con dibujos de paraguas, nuves y termómetros, pero ¡cómo me voy a fiar!, si en alguan conocida marca de rosquillas pone que no tienen colesterol.....

1 comentarios:

Abu dijo...

No te preocupes, que esto de ir a vivir a Finlandia está "chupao" Nosotros ya hemos hecho traslado similares media docena de veces. Al principio parece difícil, pero luego te das cuenta de que .....es difícil de verdad. Pero se supera, y tu eres testigo de ello.

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